El pueblo dónde vivo I

El pueblo dónde vivo,porque no nací aqui,pero llevo más tiempo aquí que en ningún sitio.Os voy a hablar un poco de "mi pueblo".Para si os animais a visitarlo.

Villamuriel de Cerrato municipio de la comarca del Cerrato, en la provinncia de Palencia comunidad autónoma de Castilla y León, en España.
Superficie: 39.76 Km2.
Distancia a la capital: 7 kilómetros.
Actividades Principales: Industria, agricultura, sector servicios y ganadería.
Gentilicio: Villamurielenses.

Población: 6200 habitantes

Geografía

• Altitud: 715 metros sobre el nivel del mar.
• Latitud: 41º 57' N
• Longitud: 004º 31' O

Historia

La historia de Villamuriel de Cerrato anterior al siglo XII se desconoce, no hay documentación que nos indique una historia anterior al mencionado siglo. El nombre de Villamuriel, se remonta al parecer, a la época de la Repoblación (principios de siglo X). En general se supone que puede proceder del término mozárabe "moriel", que da nombre también a otras localidades de Salamanca, Ávila, y Segovia y que se relacionaría con el nombre de un noble llamado Maurellus, derivado éste de Maurus, que significa "habitante de Mauritania o moro". Con el nombre de "Villa Maurelli" aparece designado por primera vez en un falso de la Catedral de León. En los documentos se le nombra como Villa Morel y en el Becerro de las Behetrías como Villamoriel.

Cerca del Monasterio de la Consolación de las RR. MM. Clarisas de Calabazanos se han localizado materiales cerámicos y constructivos de época romana, lo que nos hace pensar en la posible existencia de una "villa" de esta época. Lo cierto es que los archivos solo nos relatan que fue repoblada a principios del siglo X sin que existan datos de sus motivos. En el siglo XIII la villa perteneció a los Caballeros de la Orden del Temple y posteriormente a la corona.

Históricamente, Villamuriel se da a conocer cuando los obispos de Palencia tenían poder temporal en la ciudad, extendiéndolo a los territorios de realengo limítrofes con Palencia. Villamuriel fue obtenido como resultado de una donación que hizo Alfonso VII el 29 de Mayo de 1141 a la sede palentina y al obispo Pedro II.

A finales del Siglo XII comienza la construcción de la Iglesia Santa María, en tiempos del obispo Arderico (1184 - 1207), cuya recia arquitectura parece proyectada para proporcionar a los prelados de la sede palentina refugio seguro en caso de peligro, pues había una situación de desavenencia entre el concejo palentino y su obispo.

La historia de Villamuriel va consolidada al poder temporal de los obispos, que hicieron de la iglesia su morada episcopal. Parece que allí fue donde acaeció la muerte del Obispo Don Rodrigo de Velasco (1418 - 1425) a manos de un cocinero suyo que estaba loco. A Pedro de Castilla se le atribuye el levantamiento de habitaciones para residencia episcopal junto a la iglesia, y la construcción de la torre, aunque en este caso debió ser una reconstrucción de otra ya existente y de la que no hay datación. Del palacio episcopal aun se conservan en la fachada de la iglesia los arcos de salida hacia los jardines, el resto fue destruido en la revolución comunera.

Las guerras comuneras afectaron a Villamuriel, donde se dio lugar la enemistad popular contra el Obispo don Pedro Ruiz de la Mota, limosnero particular del Emperador Carlos V. El 14 de Septiembre de 1520, los comuneros se trasladaron a la fortaleza la cual se hallaba en una situación de abandono, la quemaron y derribaron buena parte de la torre. Posteriormente el encargado de levantar lo que había sido derribado fue el obispo Antonio Rojas.
Durante el reinado de Felipe II, Villamuriel fue de los pocos lugares que permanecieron en el poder del obispado. El obispo Juan de Zapata fue el que encargó la construcción del coro alto en 1571.
En la historia del pueblo es importante destacar el milagro de la Virgen en el 1601. Debido a una sequía el obispo concertó una procesión desde la iglesia de Villamuriel hasta el monte del Otero en Palencia con la imagen de la Virgen en andas. La iglesia no debía tener suficientes fondos para comprar cirios, pero debido a la exigencia del obispo de la que imagen fuese alumbrada hizo que se pidiera al cerero cuatro hachones de cera prestados y cuando acabase la procesión se le pagaría la cera gastada. El milagro consistió en que las velas una vez finalizada la procesión, no solo no habían disminuido su peso sino que lo ganaron. Esto provocó que en la iglesia se dieran numerosos arreglos durante la primera mitad del Siglo XVIII, en que se renovaron prácticamente todos los altares.

Durante la guerra de la independencia tubo lugar en Villamuriel el combate entre Lord Wellington y el ejército francés. Lo cual hizo que en 1817 se tuviera que arreglar la escalera del atrio que había sido estropeada por los franceses. La iglesia perdió sus posesiones con la Desamortización, y a partir de entonces desaparecerán paulatinamente las dependencias residenciales de los obispos, y definitivamente con los arreglos del siglo XX nos quedamos sin un solo vestigio de los mismos.
Fuentes.http://www.villamuriel.net/ayuntamiento.php